- Área: 119 m²
- Año: 2016
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Fotografías:Vivek Muthuramalingam
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Proveedores: Saint-Gobain, Hindware, Jaquar
Descripción enviada por el equipo del proyecto. La casa se encuentra en el contexto de una zona residencial densamente construida en el norte de Bangalore. Un área importante de la trama a lo largo del borde de la carretera está ocupado por el expansivo dosel de un hermoso tulipán africano.
El diseño toma respeta el árbol en cada etapa en un intento de unirse con el espacio construido, considerando la luz del día y la ventilación. La casa resultante se caracteriza por un ambiente tranquilo, toques de árbol y el cielo que se mezcla con los sobrios muros de tierra, que luego contrastan con los pisos de óxido y ventanas de acero pintado.
Al entrar, el árbol es percibido por debajo de un tragaluz que cubre mayor parte del espacio de estar en la planta baja. Una cocina abierta se encuentra adyacente a la sala de estar, mientras que una habitación se encuentra escondida en un lado. Dos paredes de la cocina compartidas con el inodoro están hechas de losas de granito colocadas verticalmente en un marco metálico, que recuerda a las casas construidas en su totalidad con losas de piedra, cerca de las canteras ubicuas. Los trabajadores involucrados en esta parte de la construcción fueron notablemente envejecidas - tal vez un reflejo de una técnica que se está desvaneciendo rápidamente.
La primera planta consta de un dormitorio en dos niveles, el más bajo se manifiesta por un asiento de madera de caucho a lo largo de una gran ventana que enmarca una terraza y la copa de los árboles por encima de ella. El asiento es sw concreto, levantando la losa por encima del suelo y permitiendo la cocina debajo relacionarse con la claraboya. El nivel superior conduce a la terraza, que es un alivio en medio de casas construidas a cada lado. Una ducha y un aseo se construyen de manera similar en losas de granito. Este material se puede recuperar en su totalidad y elimina la necesidad de suelo de baldosas, mientras que su estructura de metal reemplaza la necesidad de marcos de puertas.
Una escalera exterior en la planta baja conduce a la terraza y continúa hasta un apartamento en el segundo piso. Este espacio cuenta con vistas directas a la ramificación y el cielo arriba. Los muros de granito para el tocador aquí se colocan horizontalmente para la relativa facilidad de levantar losas más cortas para el segundo nivel.
Moviéndose a través de la casa, la definición de los espacios interiores y exteriores se siente borrosa. La claraboya genera interiores que cambian con la luz y los colores del cielo a lo largo del día. El techo de cristal emula un lienzo en blanco sobre el que caen flores. Este techo abierto y la terraza bajo el árbol reinterpretan un patio en una pequeña parcela urbana.
